Ella se sentía culpable por tener en la cabeza
ese recuerdo ya imborrable que inundaba de tristeza
la riqueza de su ser,
por no poder retroceder hasta ese ayer.
Defender a espada y capa
su espacio vital aún a costa de caer en un abismo violento
su integridad moral aún a riesgo de perecer en ese mismo intento
Aún asi lo estuvo haciendo hasta saber
que de momento tanto mal al final la iba a vencer.
Maldito día invernal en el que bajo un manto de estrellas congeladas
que alguien bajo del cielo, en el suelo su alma ya se desvanece.
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