Ahora puedes sentir lo que yo sentí un día, ver a todos desde lo más abajo y sentir que no puedes hacer nada. Gritar no sirve para nada y quedarse en silencio tampoco. Puedes esperar todo el tiempo que quieras y te darás cuenta cuando te canses de que nunca fuiste importante para nadie, ni siquiera para mí.
0 comentarios:
Publicar un comentario